El Mito del Celular y el Cáncer
Si eres una persona que lee noticias en uno que otro blog escandaloso, probablemente te hayas encontrado con un terrorífico anuncio: tu teléfono celular puede causar cáncer. Escrito así o de cualquier otra manera, resulta un título bastante llamativo, pero afortunadamente, no tan acertado.
Los teléfonos celulares se han convertido en la herramienta más esencial para muchos grupos de personas, ascendiendo más allá al nivel de transformarse en un obligatorio símbolo cultural.
El tema de si es peligrosa o no la energía que emiten estos dispositivos es uno de los más controversiales, no solo en este momento, sino que ha sido así desde hace unas cuantas décadas atrás. Desde la aparición de los primeros transmisores de ondas (radios), se ha debatido si estos están vinculados a la formación de tumores malignos.
Entendiendo el Mito
Este mito nace de la confusión que presentan diversas personas regularmente cuando se habla de radiación electromagnética. Pues todo resulta en una especie de malentendido, ya que existe una gran diferencia entre la perjudicial y la inofensiva.
En pocas palabras, la radiación es esa energía que viaja por el universo y se va esparciendo. Uno de los mejores ejemplos de estos es la luz visible que puedes notar en los bombillos y aquellos otros, los rayos UV que emite el sol.
Una de las principales teorías utilizadas para respaldar este hecho se basa en un estudio realizado directamente en ratas y ratones, en donde se analizan los resultados de la proyección de ondas estos animales. Los animales usados para los estudios sí mostraron indicios de tumores malignos, principalmente cerebral.
Cabe destacar que en el estudio mencionado, las ondas de radio eran siete veces más poderosas que a la que las personas se someten a diario.
Este tipo de experimentos suelen salir a la luz con enorme recibimiento gracias a la estructura convincente en la que se basan, como la que el sistema fisiológico de los ratones se parece al de los humanos. Pero no es suficiente para concluir en resultados verídicos sobre un tema tan importante como este.
La Realidad Científica
Todos sabemos que la tecnología ha avanzado con alocada velocidad y la verdad es que a pesar de todo, los estudios científicos pueden tomarse mucho tiempo en dar respuestas, sobre todo cuando se trata de una tecnología relativamente reciente.
Los teléfonos celulares no son los únicos dispositivos incluidos en los márgenes del estudio, pues muchas otras inalámbricas como las redes WiFi y los monitores de bebes han sido sometidos a una serie de indicaciones para prevenir cualquier percance.
Como punto final, se puede concluir en que no existe una respuesta decisiva. Esto puede tornarse en un asunto trivial ya que, sin ninguna respuesta autentica, la verdad podría alterarse a gusto de las personas.
Así que mientras los datos no nos indican un vínculo real entre los smartphones y la patología, se debe tener paciencia y por el momento, marcarse con un gran “quizás” a lo que puede ser uno de los mayores escándalos de los tiempos actuales.
