En las últimas décadas, se han estado acumulando los estudios que respaldan el vínculo que existe entre el VPH y el desarrollo de múltiples tipos de cáncer. En este caso, nos disponemos a abordar el cáncer de cuello uterino, el rol que el VPH tiene en su aparición y, finalmente, la fantástica vacuna que podría salvar tantas vidas cada año.
Los Números del Cáncer de Cuello Uterino en Colombia
Los números no mienten. Estos han sido bastante preocupantes en Colombia, donde el cáncer de cuello uterino es uno de los más mortales entre la población femenina. Aun cuando se ha trabajado duro en el país para mejorar el alcance del sistema sanitario, las cifras se mantienen al alza.
En 1990, se registraron 8,6 muertes por cada 100.000 personas, debido a este tipo de cáncer. En vez de lograrse reducciones de este número, se ha experimentado un sutil pero preocupante aumento, alcanzando las 10,3 muertes por cada 100.000 personas.
Las mismas estadísticas demuestran cómo el cáncer de cuello uterino empieza a atacar antes de que la mujer colombiana alcance los 30 años de edad. A partir de ese momento, la incidencia de la enfermedad aumenta en un 50 por ciento con cada 5 años que la mujer cumpla.
En comparación con otros países suramericanos, Colombia está en una situación muy balanceada: con cifras preocupantes pero, aun así, hay países vecinos que sufren más de esta condición por notable diferencia.
Los factores de riesgo para la aparición de cáncer de cuello uterino en Colombia también están bastante claros para las autoridades sanitarias. Estas afirman que 10,3 muertes por cada 100.000 habitantes, están determinadas por el hábito de tener relaciones sexuales sin protegerse, claramente por la presencia del VPH, mientras que el segundo factor es el uso de tabaco, que es responsable de 0,5 de las muertes.
El Rol del VPH
Para la medicina moderna, ya no parece haber duda alguna sobre el rol fundamental que tiene el VPH para el subsecuente desarrollo del cáncer de cuello uterino. De hecho, este tipo de cáncer ahora se le es atribuido directamente a esta enfermedad de transmisión sexual.
Existen múltiples tipos del virus del papiloma humano, de los cuales no todos tienen relación con el cáncer de cuello uterino. Esto es un alivio, pues desgraciadamente el VPH se ha convertido en una enfermedad común y de rutina, que la mayoría de las personas ahora parece tener.
El VPH crea condilomas e infecciones que, con los años y sin que la paciente se dé cuenta, pueden transformarse en un caso de cáncer de cuello uterino.
Sacando Provecho de la Vacuna
Ahora mismo, existe una vacuna testeada y aprobada que tiene suficiente efectividad para proteger el organismo de este virus, una vez se entra en contacto con él por vías sexuales.
Lo más importante de esta vacuna es que, como es de esperarse, se concentra en aquellos tipos de VPH que tienen un riesgo mayor para el desarrollo de células malignas.
El mejor momento para colocarse la vacuna del VPH es durante la adolescencia, pues el sistema inmunológico puede procesarla de manera más eficiente y garantizar su efectividad. Con el paso de los años, utilizar esta vacuna sigue siendo igual de recomendable pero hay evidencia de que la efectividad va cayendo.